Un amigo...preferiria decir...un admirador... me ha dejado esta belleza en un coment sobre el tema que subi ultimamente sobre ls despedidas...bueno, me encanto, me parece de una perfecta concordancia con el tema..asi que... aca se los dejo, para que lo disfruten tanto como yo...
Gracias amigo...
Sole...
la incertudumbre de volverte a ver me permite apreciarte más en tú compañía: cuando nos juntamos nos faltan palabras y se nos olvidan temas repasados para actualizarnos, trato de reponer las horas, los días perdidos, las sonrisas no mostradas, las caricias pendientes. Intento pagar las promesas de amor, vivir los momentos imaginados, dibujar mis dedos en tu espalda, plasmar tu expresión en mi mente.
Y ahora quiero más, quiero un adelanto de besos, quiero un recuerdo en mi billetera, quizá una prenda robada... que sabes que ha sido robada, un disco que ames, un chiste para recordar y con suerte un gemido que hasta escuche el vecino.
¿Cuáles son las prioridades en estos momentos? no las hay! y si las hubiese, que esperen: porque tengo que sentirte, debo escuchar tus tacos al caminar, degustar tu aliento, capturar tu fijura en mis pupilas, sentir la tibieza de tus humedades, imaginar lo que hay debajo de las transparencias que te cubren, sentir tu peso y tus calores, tus rugosidades internas, los jadeos y ritmos, sudores y fricciones...y entonces luego...todo acaba de nuevo y te vas y me voy, la incertidumbre nuevamente se apodera de mi, pero me quedó tu olor, me sonrío al recordar lo que hicimos, pero un hueco profundo en mi vientre se hace cada vez más gande...
La despedida nuevamente es reemplazada por la fé de un posible nuevo encuentro. Y si quizá no te fueses nunca más, la magia del encuentro, de la añoranza, de la despedida no mantendría viva esta llama que lucha como llama de vela en tormenta de agosto.
me senti super identificada, hoy es un día muy sencible para mi...pero me quedó tu olor, me sonrío al recordar lo que hicimos, pero un hueco profundo en mi vientre se hace cada vez más gande...
ResponderEliminarLa despedida nuevamente es reemplazada por la fé de un posible nuevo encuentro. Y si quizá no te fueses nunca más, la magia del encuentro, de la añoranza, de la despedida no mantendría viva esta llama que lucha como llama de vela en tormenta de agosto.... me gusto todo, pero esta parte fue la que más me pego.